VALORES DE LA ORDEN HOSPITALARIA
Estar en la Orden Hospitalaria debería configurarnos. La Hospitalidad es
uno de los valores primarios que tiene el ser humano, pero hay que cultivarlo.
Las personas estamos más predestinadas a la benevolencia que a la
maldad. La prueba es que aún subsistimos y no nos hemos destruido unos a otros.
Nos indica varios libros relacionados con el tema…
Etica de la Hospitalidad (Daniel Inerariti)
Sobre la hospitalidad, extraños
y vulnerables como tú
(Frances Torralba)
Política de la amistad (Jaques Derriga)
La Hospitalidad puede ser una virtud pacífica, para construir
felicidad, o puede ser bastante incordiante porque me exige interiormente y
porque tiene sus riesgos.
La Orden Hospitalaria no puede dejar de acoger. Se ha de acoger a
cualquier persona, sin discriminación de ningún tipo (ideología, religión,...).
Contemplamos un cuadro que representa a San Juan de Dios realizando
tareas domésticas, lavando, despiojando a un niño y rodeado de otros jóvenes
que aparentan tener alguna discapacidad.
San Juan de Dios no nos dejó ningún texto escrito, sólo algunas cartas,
en las que se observa una persona preocupada, “metida en líos” por hacer el
bien, con grandes problemas económicos,... No fue alguien importante,
influyente, con poder,.. fue uno de tantos, al que se le ocurrió acoger a los más vulnerables. Como ejemplo ¿de qué murió? Dice uno de sus biógrafos
que “se desvencijó”, se agotó sirviendo a los demás.
Pasamos a hablar de los VALORES. ¿Qué son? Un conjunto de normas
establecidas, que nos impulsan y ayudan a actuar de manera responsable frente a
diversas situaciones.
Todos funcionamos por valores, por convicciones, creencias. Todo valor
es un concepto operativo, que lleva a la praxis. Es innato. El ser humano no
puede vivir sin valores.
La jerarquía de valores son la base de la cultura, mejoran nuestra vida,
nos humanizan, perfeccionan nuestra naturaleza, nos ayudan a ser humanos, a ser
lo que somos o lo que debemos ser.
Los valores se transmiten por contagio, son dinámicos y cambiantes,
requieren tiempo y asimilación. No se puede decir “soy hospitalario” sino
“estoy en camino, en proyecto de…”.
Valores de la Orden Hospitalaria: son los valores de la institución.
Son.. la Hospitalidad, Calidad, Respeto, Responsabilidad y Espiritualidad.
HOSPITALIDAD es un meta-valor. Si no se da en la realidad, no hay Orden
Hospitalaria. ¿Qué significa? Significa que “me hago cargo”, me responsabilizo
de las personas, sobre todo de las que no tienen capacidad de valerse por sí
mismas. Es implicarse, involucrarse con ellas. A la persona hay que acogerla
con todo lo que trae, con su historia, su biografía, su mundo de valores, sus
manías,... tal y como viene, y sin pretender cambiarla. El acogimiento ha de
ser gratuito, sin pretensiones. Sólo pretendo acoger.
Hospitalidad es acoger en la propia casa al “extraño”, que además es
vulnerable.
Es importante que analicemos nuestras motivaciones ¿por qué hago esto,
qué motivaciones me mueven,..? Nunca intentar convertir al otro para nuestra
causa. Esto sería negación de la Hospitalidad.
Bajo estos valores hay toda una comprensión del ser humano. Es sentir
que todos son mis hermanos, “y me duelen sus penurias, sus pobrezas,.. porque
son hermanos míos” (esto decía San Juan de Dios).
“La hospitalidad pura e incondicional no consiste en una invitación con
condiciones, con la condición de que el otro se adapte a las leyes y normas de
mi territorio. Una hospitalidad sin riesgo ¿es una hospitalidad verdadera?”
(Derrida)
El ser humano es lugar sagrado y eso implicaría su profanación.
Lo que hagamos ha de ser auténtico. Y si no, hemos de retirarnos, para
no profanar la hospitalidad.
“ Piedad religiosa, hospitalidad y civilización van siempre unidos” (La
Odisea, de Homero).
Hospitalidad e identidad: Hospitalidad “sin pagar peaje” o sin pérdida
de la identidad propia. Es un deber sagrado.El otro es el que nos ayuda a
cobrar sentido de nuestra propia identidad. Lo primero ha de ser valorar al
otro. El yo no existe si no hay un tú, no hemos de ver al otro como
enemigo, contrincante. Cada persona tiene su propia identidad. Se trata del
movimiento de acercamiento del yo al tú. Es acoger, compartir lo que uno
tiene, pero según las necesidades del otro. Tenerle en consideración.
Cuando avasallamos, damos por hecho las necesidades del otro,..
nosotros quedamos bien, pero la otra persona puede quedar anulada.
Hospitalidad también es proporcionar lo suficiente para que el otro
mantenga la autonomía. Lo que cuenta es estar juntos.
Es importante que el anfitrión desaparezca, y el nivel de los dos se ponga
en el mismo plano,... y en gratuidad. Hospitalidad es hacer todo para recibir a
nuestro huésped, pero sin que él lo perciba. Y la razón es… para que no se
sienta “obligado” con quien se ha tomado tanta molestia.
La hospitalidad no es patrimonio de ninguna religión. “Mira a tu
huésped como a Dios mismo que viene a recibir tu atención” (budismo).
La Hospitalidad es encuentro, reconocimiento, acogida, respeto por el
ser humano y su dignidad, clave para construir un mundo humano y para todos.
“La hospitalidad es primera” (Derrida). Antes que hacer hay que ser.
Del ser se deriva el hacer. Quien es hospitalario hace obras hospitalarias.
Todos somos hospitalarios y huéspedes.
A la Hospitalidad se entra, no por la puerta principal, sino por la de
servicio. Y para esto hay que ser muy maduro. Significa tener capacidad de
hacerte pequeño siendo grande. Por eso es una virtud a trabajarse porque el yo
(el poder,..) aflora rápidamente si no estamos vigilantes. Hay que saber
trabajar esto.
Juan de Dios: un estilo. Un ser humano con una experiencia (de ser
acogido y perdonado),.. que le llevó a transformarse en persona misericordiosa. Funcionamos en la vida por las experiencias
que nos marcan.
Contemplamos al final un cuadro: La
triste herencia (Sorolla).